La Vanguardia, 22/02/2009

Petición al episcopado catalán para que se pronuncie sobre una web "católica" que se mueve en el anonimato


"La Iglesia debe informar con ética"


ORIOL DOMINGO - Barcelona


La comunicación católica debe ser un modelo ético y este debe ser el estilo informativo de la propia Iglesia. Esta es, en síntesis, una de las tesis que el jesuita Federico Lombardi, director de la sala de prensa de la Santa Sede, acaba de exponer en Madrid.

Al mismo tiempo, en Barcelona, se pide al episcopado catalán que se pronuncie sobre una web "española y católica" que, ocultándose en el anonimato de internet, intenta dividir a los obispos y fieles de la Iglesia en Catalunya. Así se ha planteado en la última sesión mensual de reflexión de la actualidad cultural y religiosa que organiza la Fundació Joan Maragall (FJM).

Obispos y sacerdotes atacados sin piedad. Se explicó en la repleta sala de actos de dicha fundación, sin ninguna voz en contra, que esta web sintoniza con los obispos ordenados por el cismático y ultraconservador arzobispo Marcel Lefebvre ya fallecido, y con el talante radiofónico de Federico Jiménez Losantos. Desde esta página web se arremete sistemáticamente y sin piedad, por ejemplo, contra cardenales como Lluís Martínez Sistach, obispos como Joan-Enric Vives, Pere Tena y Carles Soler Perdigó, abades como Josep M. Soler, sacerdotes como Antoni Matabosch, Salvador Pié, Josep M. Turull, Jaume Aymar y Francesc Romeu, seglares como Albert Manent y de la FJM y Església Plural. Pero elogian a otros cardenales y obispos.

Algunos prelados expresan en privado su tristeza por este fenómeno. Un internauta tropezó un día con esta web y leyó un escrito, firmado como todos con pseudónimo, que descalificaba a Pere Tena. El pecado de este obispo, de gran prestigio por sus aportaciones litúrgicas, es el haber lamentado que este medio autoproclamado "católico" utilice un estilo hiriente y descalificador.

Llamamiento episcopal a superar tensiones y resentimientos. El episcopado catalán aún no se ha pronunciado de manera explícita sobre los contenidos y la forma de esta web "católica". Tan sólo lo ha hecho de forma implícita en sus dos últimos documentos.

Así los obispos escriben en su carta pastoral Pau, apòstol del nostre poble: "La santidad se vive en comunidad, uno junto al otro, no ignorándose mutuamente o hablando mal del otro e hiriéndolo (...) Es necesario superar las tensiones y los resentimientos que a menudo se dan entre maneras de vivir y expresar la fe en Cristo. No tendríamos que criticar o fiscalizar los dones y los carismas de los hermanos en la fe (...) ¿Qué autoridad moral tendremos para construir un mundo unido y en paz si levantamos muros dentro de la misma comunidad de fe".

El otro documento es el mensaje episcopal presentado en una reciente jornada interdiocesana de sacerdotes y diáconos con motivo del año jubilar en Tarragona. Afirman: "Hemos de actuar con una generosa comunión eclesial (...) El amor nos ha de llevar a no criticar, a no interpretar mal a los otros, a ser comprensivos".

Estos textos son comentados en Catalunya Cristiana por mosén Josep M. Domingo, director del Centre d´Estudis Pastorals, que también son - sacerdote y centro-criticados con acritud en esta web. Mosén Domingo, en sintonía con los dos documentos episcopales, reclama "concordia eclesial" y una actitud recíproca de "perdón y tolerancia".

"Hemos de usar un lenguaje respetuoso hacia los demás". Ello enlaza con la postura que la Iglesia y sus organismos han de tener en materia de comunicaciones sociales. La postura del portavoz vaticano, Federico Lombardi, sintoniza con el episcopado catalán y disiente de la mencionada web.

Lombardi explica los criterios de la visión cristiana de la información. "La Iglesia - dice-comunica un mensaje que no es abstracto ni deslindado de la vida real de la gente, de nuestros hermanos y hermanas entre quienes y por quienes vivimos".

Añade: "El anuncio de la Iglesia está estrechamente relacionado con la realidad del mundo. No pensamos en una comunicación católica separada de una comunicación profana. Lo que nos interesa es el hombre, todo el hombre y sus problemas vistos desde la perspectiva del Evangelio. Ciertamente, nos interesa la vida de la Iglesia en su acontecer cotidiano, pero también toda la vida de la humanidad con sus problemas de desarrollo, justicia, paz".

Lombardi defiende una visión de la realidad que no excluya a Dios. "Es importante - explica-no dividir rígidamente la información entre sacro y profano, entre eclesiástico y mundano, sino demostrar que las dimensiones y motivaciones morales y religiosas son parte esencial e importante del mundo de la vida".

Otro criterio, según Lombardi es el servicio para la paz: "Debemos tratar, siempre, de favorecer la comprensión y el diálogo entre las diversas posiciones y los diversos pueblos y no acentuar las contraposiciones. Saber estar con paciencia en las tensiones incluso al precio de ser criticados. Usar siempre ycon decisión un lenguaje respetuoso hacia los demás, equilibrado y no agresivo, capaz de inspirar serenidad de juicio y comprensión recíproca".